Blanche De Bruges 25Cl

Perfil técnico del producto: Blanche De Bruges

La Blanche de Bruges es una auténtica cerveza blanca belga que representa la esencia de las witbier tradicionales. De aspecto pálido y turbio, con espuma blanca y cremosa, transmite frescura desde el primer momento. En nariz despliega un abanico aromático elegante, con notas cítricas de naranja amarga y limón, acompañadas de un toque especiado de cilantro y hierbas, que invitan a una degustación refrescante y equilibrada.

En boca, la Blanche de Bruges ofrece un cuerpo ligero a medio, con una textura suave y sedosa gracias al uso de trigo sin maltear en su receta. Su sabor es fresco, con predominio de matices cítricos y especiados, que se combinan con una ligera acidez que aporta vivacidad al trago. El amargor es muy bajo, en torno a los 10-15 IBU, lo que refuerza su carácter fácil de beber y su naturaleza refrescante. La graduación alcohólica se sitúa alrededor del 5% vol., lo que la convierte en una cerveza ligera y perfecta para acompañar diferentes momentos.

Su composición incluye agua pura, malta de cebada, trigo, cáscara de naranja amarga, semillas de cilantro y lúpulo de perfil suave, junto con levaduras seleccionadas que aportan un toque afrutado y especiado muy característico. Gracias a este equilibrio, la Blanche de Bruges se ha consolidado como una de las cervezas de trigo belgas más reconocidas, ideal para maridar con pescados, ensaladas frescas, quesos suaves o mariscos. Su carácter refrescante la hace especialmente recomendable en climas cálidos o como aperitivo elegante.

Historia y fabricante del producto: Blanche De Bruges

La Blanche de Bruges se elabora en la ciudad de Brujas (Brugge), Bélgica, un lugar con una tradición cervecera profundamente enraizada en la historia del país. Esta cerveza nació como un homenaje a las antiguas witbier que se producían en la región desde la Edad Media, cuando el uso de especias como el cilantro o la cáscara de naranja era común para aportar frescura y complejidad. Con el tiempo, la receta se mantuvo como símbolo de la identidad local, preservando una técnica de elaboración artesanal que sigue vigente.

La marca Blanche de Bruges está actualmente ligada a la cervecería Brouwerij De Halve Maan, una de las más emblemáticas de la ciudad de Brujas, conocida por su tradición familiar y por haber mantenido la cultura cervecera local durante varias generaciones. La fábrica se ubica en el centro histórico de la ciudad, lo que la convierte no solo en un lugar de producción, sino también en un atractivo turístico que combina historia, arquitectura y pasión cervecera.

Fundada en el siglo XIX, la familia Maes-Vanneste ha sido uno de los motores de la cervecería, que actualmente se encuentra en manos de la última generación. Su labor ha sido clave para que la Blanche de Bruges conserve su autenticidad y prestigio, posicionándola como una de las cervezas blancas más representativas de Bélgica. Este vínculo entre la receta tradicional y la identidad cultural de Brujas ha sido determinante para mantener viva la esencia de esta cerveza, reconocida a nivel nacional e internacional.

Curiosidades del producto: Blanche De Bruges

La Blanche de Bruges esconde numerosas curiosidades que la convierten en una cerveza singular dentro del mundo de las witbier. Una de las más interesantes es que, a diferencia de muchas cervezas modernas, mantiene la receta tradicional con trigo sin maltear, cilantro y cáscara de naranja amarga, ingredientes que la conectan directamente con las antiguas cervezas blancas elaboradas en Bélgica desde hace siglos. Este respeto por la tradición ha sido uno de los factores clave para que conserve su autenticidad y atractivo.

Otro detalle curioso es que la Blanche de Bruges ha sido considerada durante décadas un símbolo de la ciudad de Brujas, hasta el punto de que su consumo se asociaba tanto con la vida cotidiana local como con el turismo. Los visitantes que recorrían los canales y calles medievales de la ciudad encontraban en esta cerveza una experiencia sensorial única que completaba la vivencia cultural del lugar.

Además, ha recibido distintos reconocimientos en certámenes internacionales, gracias a su equilibrio y frescura, lo que refuerza su estatus como una de las cervezas blancas belgas más respetadas. Su versatilidad gastronómica también es motivo de interés, ya que marida de manera excepcional con platos frescos y ligeros, pero también con recetas especiadas, demostrando la riqueza de su perfil. La Blanche de Bruges es, en definitiva, una cerveza que no solo refresca, sino que también cuenta una historia de tradición, cultura y orgullo belga en cada sorbo.